Entre las 140 000 enmiendas introducidas en la nueva edición del DRAE aparece suite en redonda, es decir, ha dejado de ser un extranjerismo crudo para convertirse en palabra del idioma español. ¿Por qué este trato preferente?

En cambio, los extranjerismos de uso corriente en español que se han adaptado a nuestra lengua y no plantean, por ello, problemas de inadecuación entre su grafía y su pronunciación según nuestras convenciones ortográficas, se consideran palabras españolas a todos los efectos y, por tanto, no necesitan marcarse en modo alguno: …

Esto es lo que la Ortografía de la lengua española, en su página 604, afirma. ¿Pronunciamos [suite] o [suit]? No sé si en algún lugar se dirá de otra manera, pero por estos pagos se oye solo la segunda.  Así que no entiendo cuál será la razón para esta discrepancia entre grafía y pronunciación, ya que no parece que las convenciones ortográficas se vean amenazadas. ¿Qué razón habrá para mantener la grafía original?