Llevo unos días con este asunto rondándome por la cabeza.

La curiosidad sobre la pronunciación de la palabra italiana «pizza» me ha llevado hasta una respuesta de la «RAE» en Twitter, que dice así:

La secuencia «-zz-» es ajena a la ortografía del español, de ahí que «pizza» se considere un italianismo crudo o no adaptado. Los extranjerismos crudos son los que conservan su grafía y pronunciación originarias, en este caso [pítsa]».

Si  pizza sigue siendo un ‘italianismo crudo’ y ha de escribirse en cursiva o entre comillas porque la secuencia -zz- no es propia del español, ¿cómo es que «pizzería», «pizzero» sí han sido adaptados y, por tanto,  aparecen en redonda en el DLE. ¿Es que la secuencia -zz- de ‘pizzero’ no es igual que la de pizza?

Pasa lo mismo con jazz y jazzista, jazzístico.

¿No os parece una incongruencia? ¿Hay alguna razón que se me escapa para que ocurra esto?