Hola, amigos:
Una pregunta de las mías, otra vez.
¿Podríais decirme si en la expresión En Navidad se dispara el marisco hay metonimia?
Yo creo que sí, pero tanto me lo discuten que ya he empezado a dudar. Nada mejor que consultar con el oráculo del Café Blasita para salir de dudas.
Entiendo que es un «enredo» como cambiar la cama, tender la lavadora o comerse un plato.
Una de las acepciones de disparar es
Incrementar o hacer crecer sin moderación algo
pero no cabe duda de que el marisco ni crece ni se incrementa, sino su precio.
De verdad que, después de tantos años practicándolo, a veces creo que ya no sé ni hablar español.
Un beso a todos y muchísimas gracias.
Hola Madri. Hace mucho ya que estudié las figuras literarias y seguramente diré alguna barbaridad. ¿No podría ser sólo una elipsis o algo así: «se dispara el (precio) del marisco? ¿Qué es lo que dicen esos que te llevan la contraria?
Por lo menos una ocasión para saludarte.
Hola, Monic:
Gracias por responder.
Nada menos que es una frase ambigua, porque disparar(se) tanto puede significar pegarse un tiro como subir, incrementarse.
De hecho, circula un meme por ahí con dos bueyes de mar disparándose con una pistola el uno al otro en alusión a ese se dispara. Sí es cierto que existe la ambigüedad desde el momento en que se toma un significado por otro, pero no ven la metonimia por ningún lado. Yo creo que sí la hay, porque se toma al marisco por su precio.
Entiendo que hay metonimia en frases habituales como «poner la mesa» (uno no pone la mesa en ningún lado, sino que coloca encima de la mesa lo necesario para comer, «el recado de comer» que dirían en otro tiempo). O «cambiar la cama» (tampoco cambiamos el mueble ni de sitio ni por otro, sino que vestimos la cama, cambiamos la ropa de la cama).
Esto de aplicar el nombre correcto a cada figura a veces resulta algo complicado, pero es un buen ejercicio.
También me alegra saludarte. Ocasión para darte un abrazo.
Buenos días:
Habrá que esperar a que opine «el oráculo del Café», como tú dices, Madri, que es Blasita.
Mientras tanto, algo tendré que decir, pues yo… «ni debajo del agua»:
Partiendo de que en una metonimia se sustituye la causa por el efecto o a la inversa, consideraría que hay una metonimia en esta frase, por ejemplo:
En Navidad el precio del marisco es ruinoso.
Si nos referimos al presunto comprador, aquí sustituimos muy caro, que es la causa, por el efecto, que es ruinoso, ya que esos precios arruinarían a muchos compradores.
Pero esa sustitución causa/efecto o efecto/causa no la veo en el título de esta entrada, Madri.
Sí, es verdad en cierto modo, pero yo creo que hay que suponer que lo que se incrementa es el precio (sin necesidad de nombrar esta palabra: es la elisión a la que se refiere Monic). Se vería más claro si en esa definición figurase el verbo que solemos utilizar en estos casos, es decir, el verbo subir, que no precisa hacer referencia al precio porque se entiende: Ha subido el pan una barbaridad.
Entonces, la frase inicial se podría sustituir por esta otra, que me parece menos problemática:
En Navidad
se disparasube muchísimo el marisco.Bueno, pues salgo del agua y me callo.
Abrazos. 🙂
Buenos días a todos:
Muchas gracias, Robin, por tu confianza en mi pericia al respecto, aunque es un hecho que el oráculo del Café está muy bien repartido entre los blasiteros. He leído con interés vuestros comentarios, Madri, Monic y Robin. Os doy mi opinión a continuación.
Entiendo la asociación marisco-precio que haces para llegar a la interpretación de metonimia, Madri. Este consolidado significado de «disparar» habrá surgido por la extensión a otros ámbitos del sentido de rapidez de un proyectil disparado con un arma de fuego. Al estar relacionado con conceptos de connotación negativa (precio alto, violencia, etc.), se añade la subida, «más» (alto y rápido); por consiguiente, veo en esto una combinación de elementos metafóricos y metonímicos, sin olvidar la influencia de nuestro conocimiento del mundo. Nosotros sabemos que en Navidad el marisco, que es de por sí un producto caro, se pone todavía mucho más caro, y esto nos ayuda a abordar frases, en las cuales se sobrentiende que hablamos del precio del marisco sin que «precio» esté expreso, de manera natural. Por lo tanto, opino que se trata de una combinación de factores (tropos y conocimiento del mundo). Aunque supongo que esos memes que mencionas serán graciosos, a mi parecer no hay posible confusión ni posible ambigüedad que emanen de tu frase.
«En Navidad el marisco está por las nubes». Está claro que de aquí no se infiere que podamos ver bogavantes volando por el cielo. Asociamos las nubes a altura, la altura con la carestía en un contexto claro de precios. Es evidente que este caso no es el mismo que tú presentas, Madri, ya que aquí tenemos una locución que ya posee el significado de «precios caros»; sin embargo, me parece que la base es parecida, es decir, existen elementos metafóricos, metonímicos y de conocimiento del mundo que han propiciado que frases idiomáticas tengan un significado claro para los hablantes.
Un abrazo.
Hola, queridos amigos:
¿Qué os decía yo? ¿Es un oráculo o no nuestra Blasita? A mí así me lo parece.
Os agradezco mucho vuestros comentarios. Hay que ver: decimos que «en Navidad se dispara el marisco» y es como si no tuviera ninguna importancia, porque todos sabemos qué significa. Pero nos metemos en el mundillo de la gramática… y la que hemos liado sin darnos cuenta.
Un beso a todos.