Hola, buenas:

Cuando hace unos días Milord (¿o deberíamos llamarlo Ourlord? je, je) escribió la entrada «Ineluctable» comprendí que acababa de crear una sección dedicada a traer y comentar en este blog palabras o acepciones de palabras que son poco usuales aunque la Academia las mantenga en su diccionario como de uso normal y generalizado.

Hay tantas, que podríamos convertir este sitiio en un blog monográfico, pero eso no es, naturalmente, lo que queremos. Por ese motivo, antes de plantear yo un asunto de este tipo (en la entrada siguiente) he dejado pasar más de una semana desde la citada intervención de Milord, a fin de que, como digo, haya variedad de temas en este blog.

Se trata de algo subjetivo, obviamente, ya que cada uno de nosotros tiene su propio léxico, de manera que lo que para unos resulta desconocido, para otros puede ser algo archisabido, y probablemente será a la inversa en otros supuestos. De todo modos, para exponer casos de esta índole hay que ser valiente (como yo 🙂 ) porque hay que comenzar por hacer públicas nuestras lagunas idiomáticas.